La leche frita es una receta realmente atractiva para el paladar y es un postre muy recomendable para poder hacerlo ahora que se aproxima la navidad, porque resulta muy sencillo. Para hacer la leche frita necesitamos un litro de leche, una taza de azúcar, limón, unos 100 gramos de harina de trigo, dos huevos, canela y aceite de oliva.
En una olla debemos echar la leche con la ralladura de la cáscara de limón, además de la harina y el azúcar. Dejamos a que la mezcla se caliente bien y que tenga una textura más densa. Apagamos el fuego y lo volcamos todo en una bandeja hasta que se enfríe totalmente y es importante que la bandeja sea ancha para que la capa no resulte muy gruesa.
Cortamos unos trozos y los vamos introduciendo en un bol con harina y después en otro bol con huevo batido. Ahora falta esperar a que el aceite de la sartén se caliente para freír los trozos, el tiempo necesario hasta que queden crujientes. Es una receta de cocina que no requiere de ninguna habilidad, sino simplemente requiere un poco de tiempo y ganas de disfruta con una delicia de postre.
Antes de que se enfríen lo espolvoreamos con azúcar para que tenga un sabor aún más dulce y ya tenemos preparada nuestra receta de cocina, ideal para sorprender con un postre diferente y muy agradable al paladar de los más golosos de la casa, que seguro quedarán encantados con este postre de leche frita.
